Discurso de ascensor
Son muchas las prácticas de implicación en las decisiones directivas –como los equipos autogestionados, los pagos de incentivos y la formación proporcionada por la empresa– que han demostrado aumentar la productividad y el rendimiento financiero en las empresas. Sin embargo, se sabe menos sobre si estas prácticas que otorgan más criterio y autonomía a los empleados también les benefician. Según las investigaciones empíricas recientes que tratan de explicar la autoselección de empleados a empresas que aplican estas prácticas, los efectos en la salud de los empleados y en otros aspectos importantes del bienestar son por lo general positivos. Sin embargo, estos efectos varían en función del entorno institucional.
Hallazgos clave
Pros
La implicación de los empleados en las decisiones directivas se asocia con una mayor productividad y mejores resultados económicos en las empresas.
Esta implicación en las decisiones directivas otorga más criterio a los empleados y el mayor control del trabajo debilita la relación negativa entre las demandas del puesto y el bienestar de los empleados.
La mayor autonomía en el trabajo conduce a mayor bienestar de los empleados.
Muchos marcos teóricos vinculan la implicación de los empleados en las decisiones directivas con su bienestar y salud.
Las prácticas de trabajo innovadoras deberían conducir a una forma más inteligente de trabajar, no necesariamente a un mayor esfuerzo.
Contras
La implicación de los empleados en las decisiones directivas puede provocar más intensidad laboral.
Aumentar la intensidad del trabajo puede debilitar el bienestar de los empleados y dañar su rendimiento.
La implicación en las decisiones directivas puede aumentar la tensión y generar más riesgos de accidentes laborales y absentismo por enfermedad.
Las características de la empresa y las condiciones del mercado influyen en lo rentable que es para la empresa rediseñar puestos de trabajo en beneficio de sus empleados.
No existe acuerdo sobre qué prácticas de implicación en las decisiones directivas son suficientes para transformar el entorno laboral.