Discurso de ascensor
En el mundo globalizado actual, las personas cada vez viajan más y a menudo necesitan comunicarse en distintos idiomas. Aprender un nuevo idioma es una inversión en capital humano. Los migrantes deben aprender el idioma de su país de destino, pero incluso los no migrantes a menudo deben aprender otros idiomas si tienen que comunicarse con extranjeros en el trabajo. Algunos estudios económicos han demostrado que saber un idioma dominante es importante para el éxito económico y aumenta la eficiencia económica. Sin embargo, mantener la diversidad lingüística también tiene valor, ya que una lengua es también una expresión de la cultura de las personas.
Hallazgos clave
Pros
El bienestar económico mejora cuando los miembros de un grupo se comunican en el mismo idioma.
Aprender un idioma dominante es una inversión en capital humano.
Existen ventajas financieras importantes para los miembros de minorías lingüísticas que aprenden el idioma dominante; quienes usan su lengua materna no tienen estas ventajas en el mercado laboral.
Debido a externalidades en el uso de una lengua común, dejar que las personas persigan sus propios intereses puede no conducir a los mejores resultados.
La tendencia de que el inglés sea un segundo idioma común tiene algunas ventajas, algo que no se espera que cambie en un futuro próximo.
Contras
La diversidad lingüística tiene valor, aunque parte de este no es económico.
Debido a la relación entre cultura y lengua, cuantas más lenguas puedan adoptarse, mayor será el bienestar.
El respaldo público a una lengua minoritaria indica que las personas la valoran y están dispuestas a actuar para mantenerla.
Aunque ha habido una tendencia hacia la convergencia lingüística a nivel mundial, también existe un gran deseo de mantener la diversidad.