Los programas de mentoría para jóvenes vulnerables, ¿cambian sus perspectivas y mejoran sus oportunidades de vida?

Aunque la mayoría de los efectos son positivos, tienden a ser modestos y desaparecer con el tiempo, y algunos programas pueden tener efectos no deseados

Queens College, CUNY, and IZA, Germany

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Discurso de ascensor

Los programas de mentoría, como «Big Brothers Big Sisters of America» llevan más de un siglo ofreciendo referentes positivos y construyendo habilidades sociales. Sin embargo, la mayoría de los programas de mentoría formales son relativamente nuevos y es solo hace poco que los investigadores han empezado a evaluar su impacto en el cambio de las perspectivas de los jóvenes vulnerables y en cómo brindan oportunidades para que tengan una vida futura mejor. Aunque en los últimos años han surgido en todo el mundo diversos programas de mentoría y asesoramiento, no se sabe bien cuál es su eficacia.

El efecto de Quantum Opportunity Program en la tasa de graduados

Hallazgos clave

Pros

Los estudios rigurosos sobre la eficacia de los programas de mentoría hallan efectos positivos, aunque modestos, en algunos mentorandos.

Al ofrecer referentes positivos, los mentores promueven la resiliencia entre los jóvenes vulnerables.

Los mentores ayudan a construir las habilidades sociales (con frecuencia, débiles) de los mentorandos.

Los programas comunitarios extraescolares pueden ofrecer entornos seguros en los que los jóvenes pueden expresarse y recibir orientación para participar en actividades sociales y comunitarias.

Las actividades para mejorar las habilidades sociales y emocionales de los jóvenes tienen más eficacia en los niños más pequeños y en los jóvenes vulnerables.

Contras

Los programas de mentoría tienden a mejorar las habilidades sociales y no cognitivas de los jóvenes más que su rendimiento académico.

Los efectos positivos son escasos y tienden a desaparecer rápidamente.

Los mentores pueden sobreproteger a los jóvenes, reduciendo los costes de participar en actividades delictivas y otros comportamientos de riesgo, y debilitan la relación de los jóvenes con sus padres, lo que rompe vínculos sociales importantes.

Los programas de mentoría pueden hacer que los participantes sean más conscientes de su situación desventajosa, lo que puede provocar decepción y conductas peligrosas.

Agrupar a jóvenes muy vulnerables puede exponerlos a influencias negativas entre ellos, lo que se asocia a una mayor drogadicción, delincuencia y violencia («refuerzo antisocial»).

Mensaje principal de los autores

Los análisis rigurosos de los programas de mentoría encuentran efectos positivos aunque modestos, siendo los más desfavorecidos o los más vulnerables quienes más se benefician. La evidencia indica que los programas de mentoría tienden a mejorar las habilidades sociales y no cognitivas de los jóvenes más que su rendimiento académico. También hay evidencia de que los beneficios desaparecen rápidamente y que los programas pueden tener efectos no deseados, sobre todo a largo plazo.

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