Discurso de ascensor
En Corea del Sur, la población ha envejecido y la tasa de fecundidad ha descendido desde la década de los 90. Al mismo tiempo, el número de coreanos que viven en el extranjero ha aumentado considerablemente. Estas tendencias amenazan con reducir el prestigio internacional y económico de Corea del Sur. Para atenuar los efectos negativos de estos nuevos retos, Corea del Sur ha comenzado a comprometerse con los siete millones de coreanos que viven en el extranjero para transformar la diáspora en una fuerza positiva para el desarrollo a largo plazo.
Hallazgos clave
Pros
La diáspora coreana continúa creciendo y ahora supera los 7,2 millones de personas (11 % de la población en 2011).
Corea del Sur está fortaleciendo sus vínculos con los coreanos en el extranjero.
En la década de los 90, Corea del Sur comenzó a considerar la diáspora un bien valioso para el futuro de la nación.
Hoy en día, la cooperación económica entre las empresas de Corea del Sur y aquellas dirigidas por coreanos fuera del país es considerable.
En las décadas de los 60 y 70, preocupaba el éxodo intelectual, pero en Corea del Sur y China se observa ahora una migración de retorno de científicos e ingenieros.
Contras
Algunas personas se oponen al compromiso con la diáspora porque los coreanos en el extranjero no cumplen ciertos deberes cívicos (como el pago de impuestos y el servicio militar).
El reconocimiento de una doble nacionalidad ha encontrado resistencia debido a la fuerte tradición nacionalista de Corea del Sur.
La política de compromiso con la diáspora de Corea del Sur podría verse como fundamentalmente etnonacionalista.
A China, con dos millones de coreanos en su territorio, le preocupa la política de Corea del Sur.