Discurso de ascensor
De manera sistemática, en el mercado laboral, las mujeres trabajan menos y ganan salarios más bajos que los hombres. Aunque el empoderamiento económico de las mujeres es un objetivo importante en sí mismo, la actividad económica de las mujeres también es una condición del crecimiento económico sostenido. El debate político sobre el impacto en el mercado laboral del comercio internacional diferencia a los trabajadores por nivel educativo o habilidades. El género es otra dimensión en la que el impacto de la liberalización comercial puede ser diferente. En un mundo en vías de globalización, es importante comprender si la política comercial puede favorecer la convergencia de género en los resultados del mercado laboral y de qué manera lo hace.
Hallazgos clave
Pros
Una competencia que promueva los efectos de la liberalización comercial puede reducir la discriminación al acabar con las empresas discriminatorias o hacer que las empresas discriminen menos.
La liberalización comercial induce la inversión de las empresas en nueva tecnología, lo que puede derivar en trabajos de producción menos exigentes físicamente y más adecuados para las mujeres.
La liberalización comercial induce la inversión de las empresas en nueva tecnología, lo que puede derivar en trabajos de producción menos exigentes físicamente y más adecuados para las mujeres.
Contras
No hay un patrón global claro en la relación de desigualdad entre comercio y género.
No hay evidencia de que el cambio tecnológico inducido por el comercio reduzca la desigualdad de género en los países desarrollados.
Si los exportadores con alta proporción de capital atraen a trabajadores de sectores que requieren mucha mano de obra, la dilución de capital por trabajador puede dañar más a las mujeres que a los hombres.
Si la exportación exige más trabajadores comprometidos y las mujeres son (se perciben como) menos comprometidas que los hombres, el comercio puede aumentar la desigualdad de género.
No hay evidencia que sugiera que la liberalización comercial afecte a la desigualdad de género en mercados laborales de países de renta baja.