Discurso de ascensor
No es difícil encontrar estadísticas que demuestren que ser madre adolescente se asocia a situaciones deficientes en el mercado laboral. Pero, ¿por qué es así? ¿Tener un hijo siendo adolescente afecta de verdad al potencial económico de una mujer, o es simplemente un marcador de los problemas que esta puede ya estar afrontando como resultado de sus orígenes sociales y familiares? La respuesta a esta pregunta tiene implicaciones importantes para las medidas políticas que podrían adoptarse para mejorar las vidas de las mujeres.
Hallazgos clave
Pros
Las adolescentes que tienen hijos provienen de entornos desfavorecidos y pueden encontrarse en situaciones laborales inferiores independientemente de haber sido madres o no.
Las políticas tradicionales dirigidas a reducir el embarazo y la maternidad en la adolescencia tiene muy poco, o ningún, efecto.
Los estudios etnográficos han encontrado evidencia de ambivalencia en torno al embarazo en las adolescentes desfavorecidas.
Los factores a largo plazo, como la mayor desigualdad de ingresos (un posible marcador de la falta de oportunidades/movilidad ascendente), aumentan el índice de maternidad en la adolescencia.
Contras
Las adolescentes que tienen hijos tienen menor nivel educativo y, consecuentemente, trabajos peor pagados.
Una mejor información y el acceso a anticonceptivos parece ayudar a reducir la probabilidad de convertirse en madre en la adolescencia, pero solo hasta cierto punto.