Discurso de ascensor
Los gastos en colocación y servicios relacionados son un porcentaje importante del PIB de muchos países. Recurrir a subcontratistas privados se sugiere a menudo como una alternativa más eficaz a la oferta estatal de servicios de colocación. Sin embargo, la agencia estatal responsable tiene que diseñar y supervisar contratos que sean lo suficientemente completos para garantizar que los contratistas privados prestan sus servicios con la calidad deseada. Ninguno de los datos empíricos recientes indican que recurrir a subcontratistas es necesariamente más eficaz o efectivo que los servicios de empleo público.
Hallazgos clave
Pros
Desde una perspectiva teórica, recurrir a subcontratistas de servicios de colocación abre este mercado a la competencia, lo que puede reducir los costes en comparación con la prestación pública de dichos servicios.
Con una buena medición del rendimiento y programas contractuales bien diseñados, recurrir a subcontratistas puede mejorar la colocación, al menos para ciertos grupos de población.
Recurrir a subcontratistas permite al estado ampliar o reducir la capacidad del servicio y contratar a especialistas para grupos objetivo particulares, a la vez que evitar los compromisos a largo plazo que acompañan a menudo al sector público.
Contras
Para la agencia estatal responsable, garantizar la calidad de los servicios de empleo públicos añade grandes demandas al diseño del contrato y a los sistemas de supervisión, y no se garantiza en absoluto un proceso de subcontratación satisfactorio.
Muchos servicios de empleo públicos han sustituido estructuras basadas en aportaciones burocráticas con una gestión del rendimiento orientada a los resultados en un esfuerzo por aumentar su eficacia.
Los estudios empíricos rigurosos llevados a cabo para varios países indican que la oferta pública de servicios de colocación funcionó igualmente bien o incluso mejor que la oferta privada de dichos servicios.