Discurso de ascensor
Los robots, es decir, cualquier tipo de maquinaria desde ordenadores a programas de inteligencia artificial que hagan bien el trabajo de los humanos, pueden reemplazar a los trabajadores, incluso a los profesionales altamente cualificados, y por tanto reducir las oportunidades de buenos empleos y salarios. Pero, con las políticas adecuadas, la mayor productividad conseguida con los robots puede mejorar el bienestar de los trabajadores al aumentar los ingresos y generar más tiempo libre. Pensemos en cómo Google reduce la necesidad de bibliotecarios y ayudantes de investigación, o la forma en que la gran cantidad de cursos en línea a distancia reducen la necesidad de profesores y docentes. De qué forma estas nuevas tecnologías afectan al bienestar de los trabajadores y a la desigualdad depende de quién las posee.
Hallazgos clave
Pros
Las políticas pueden eliminar el desempleo provocado por la tecnología.
La mano de obra puede beneficiarse de las tecnologías que ahorren trabajo y capital si su oferta es menos elástica que la del capital.
El cambio tecnológico sesgado por el grado de calificación podría hacer que el aumento de la demanda relativa de trabajadores cualificados fuera más rápido que el aumento de la oferta de trabajadores cualificados.
Los trabajadores pueden ganar más con el capital que con el trabajo si son propietarios de los robots que les sustituyen.
Contras
Los robots, el software y las aplicaciones están sustituyendo a la mano de obra. Los robots podrían ocupar los mejores empleos de salario alto y dejar lo de salario bajo a los humanos.
La distribución de la renta en los países avanzados ha cambiado hacia el capital.
Poseer los robots es el determinante principal de cómo estos afectan a la mayoría de los trabajadores.