Discurso de ascensor
¿Podría incluirse el mercado laboral belga en la galería del «surrealismo belga»? A primera vista, Bélgica, con sus 11 millones de habitantes, ha resistido relativamente bien la Gran Recesión y la crisis de la deuda de la zona del euro, volviendo rápidamente a la senda del crecimiento y el empleo, aparentemente sin aumentar la desigualdad salarial. Pero si se profundiza, Bélgica aparece como un mercado laboral fuertemente segmentado, ante todo en una asombrosa dimensión regional (lingüística) norte-sur. Esta heterogeneidad extrema, junto con varios retos demográficos, debería servir de advertencia para el futuro.
Hallazgos clave
Pros
A finales de 2016, el empleo era un 5 % superior al nivel anterior a la Gran Recesión.
La tasa de desempleo femenino tiende a la baja desde 2005.
No hay un aumento claro de la desigualdad salarial.
La brecha salarial de género se está reduciendo.
Contras
En el periodo 2000-2016, la tasa de desempleo ha tendido al alza.
La diferencia entre las tasas de desempleo norte-sur sigue siendo enorme.
La tasa de desempleo juvenil está muy por encima de la de adultos, sobre todo para los poco capacitados y extranjeros.
En 2016, la participación en la fuerza laboral se mantuvo muy por debajo de la media de la UE-15, especialmente en el caso de las personas mayores de 55 años.
Los ingresos reales apenas han aumentado desde el 2000, y la incidencia de la pobreza entre los desempleados ha aumentado en la última década.