Discurso de ascensor
La participación de las mujeres en la población activa ha aumentado rápidamente en la mayoría de los países, pero para las madres sigue siendo difícil conciliar la vida personal y la laboral. El cuidado de los niños permite al cuidador principal, normalmente la madre, dedicar el tiempo de la crianza al empleo. Las políticas familiares que subvencionan el cuidado infantil y aumentan su disponibilidad tienen efectos diferentes en la oferta laboral para las mujeres en los distintos países. Para que los responsables de las políticas sepan lo bien que funcionan estas políticas, deben tener en cuenta que su efectividad puede depender de los ingresos y el empleo femenino anteriores a la reforma y específicos de cada país, y de la disponibilidad, costes y calidad del cuidado infantil.
Hallazgos clave
Pros
Los países con mayor disponibilidad de cuidado infantil asequible tienen mayores tasas de participación laboral materna.
Proporcionar cuidados infantiles, especialmente para niños en edad preescolar, ayuda a las madres a conciliar la vida personal y laboral satisfactoriamente.
Las mayores subvenciones para el cuidado infantil dan como resultado un aumento considerable de su uso.
Los mayores efectos de la oferta laboral se producen en países en los que pueden recibir las subvenciones las familias monoparentales con un padre/madre que trabaje o aquellas en las que trabajan ambos padres.
Contras
El alcance de las políticas para aumentar la oferta laboral es limitado en los países con una alta participación laboral de las mujeres o con sistemas para el cuidado infantil muy subvencionados.
Un buen acceso al cuidado infantil asequible puede resultar en un pequeño o ningún aumento de la oferta laboral materna si solo desplaza otras formas de cuidado no parental.
Las dificultades para medir la falta de personal cualificado que trabaje en el cuidado infantil y la calidad del mismo pueden hacer que las familias opten por no usar este servicio.
Las preferencias y las normas sociales pueden ser los impulsores de las elecciones sobre el cuidado infantil, no solo los costes y la disponibilidad.