Discurso de ascensor
El mercado laboral islandés se caracteriza por un alto porcentaje de sindicalización y la predisposición de los islandeses para trabajar: la participación en la fuerza laboral es alta, la semana laboral, larga, y los trabajadores se jubilan tarde. La resiliencia y flexibilidad del mercado laboral islandés se puso a prueba durante la Gran Recesión, ya que un alto porcentaje de empleados sufrieron una reducción de sus jornadas laborales y de sus salarios nominales, mientras que el desempleo aumento menos de lo esperado. En los últimos años, ha tenido lugar una fuerte afluencia de trabajadores extranjeros, sobre todo de Europa Oriental. Los estudios han demostrado que su participación en la fuerza laboral no es inferior a la de los islandeses.
Hallazgos clave
Pros
El mercado laboral está funcionando bien; la tasa de empleo es alta y la de paro, baja; la participación de los inmigrantes es activa.
El mercado laboral se recuperó rápido de la Gran Recesión; los niveles salariales se han recuperado y el paro ha descendido casi a los niveles anteriores a la recesión.
El paro de larga duración y el paro juvenil han bajado a los niveles anteriores a la recesión, lo que manifiesta los efectos limitados a largo plazo de la recesión.
La desigualdad de ingresos estaba creciendo antes de la crisis, pero bajó durante esta, lo que dejó a Islandia con el coeficiente de Gini más bajo de los países de la OCDE.
Contras
Existe un riesgo creciente de disparidad en la educación a medida que un porcentaje cada vez mayor de la población, sobre todo mujeres, se matricula en la educación terciaria, mientras la creación de empleo en los últimos años ha tenido lugar principalmente en el sector manual.
El crecimiento económico sólido produjo una carencia de mano de obra que se suplantó con la inmigración, a menudo, mediante agencias de trabajo temporal, lo que aumentó el riesgo de dumping social.
El crecimiento salarial real de los últimos años ha superado al de la productividad, lo que ha conducido a tensiones inflacionistas y a un deterioro de la posición competitiva de Islandia.