Discurso de ascensor
Comprender los impactos del cambio climático en el reparto del tiempo es un reto importante. El mejor enfoque es observar cómo reaccionan las personas a las variaciones climáticas a corto plazo. Los estudios sugieren que el aumento de la temperatura reducirá el tiempo que se pasa en el trabajo y disfrutando al aire libre en busca del ocio a cubierto. La carga recaerá de manera desproporcionada en los trabajadores de industrias más expuestas al calor y en aquellos que viven en regiones más cálidas, con un posible aumento de los patrones de desigualdad existentes. Es probable que esto desencadene una adaptación, cuyo alcance y mecanismos son difíciles de predecir, pero que sin duda implicará costes.
Hallazgos clave
Pros
El tiempo que se pasa en el trabajo solo desciende con fenómenos meteorológicos de altas temperaturas, que se producen con poca frecuencia, aunque el efecto es notable para los trabajadores de industrias más expuestas.
Hasta los 27 °C, el tiempo que se pasa al aire libre aumenta por lo general con la temperatura.
Las temperaturas invernales más altas pueden aumentar el tiempo dedicado a actividades de ocio al aire libre, que hacen que las personas estén más contentas, sean por lo general más activas y, por lo tanto, estén más sanas.
Se ha observado que los hombres trabajan más los días de lluvia, mientras que la mano de obra femenina es bastante estable.
Las personas, sobre todo las que viven en zonas con veranos cálidos, pueden adaptarse a los cambios climáticos y por tanto evitar descensos importantes del nivel de bienestar.
Contras
Predecir la respuesta de las personas al cambio climático es intrínsecamente difícil.
Los estudios se han centrado principalmente en los EE. UU. y Alemania, pero el cambio climático es un fenómeno global y los resultados no pueden aplicarse a otros países de forma generalizada.
Se sabe poco, relativamente, sobre cómo el reparto del tiempo se ve afectado por la volatilidad climática o por fenómenos meteorológicos extremos.
Unas temperaturas veraniegas más elevadas pueden reducir el bienestar al trasladar las actividades a cubierto y tener un efecto negativo en la productividad laboral.
El alcance y los mecanismos de la adaptación al cambio climático son difíciles de predecir y conllevan costes.